En el principio fue el verbo, pero nadie la escuchaba
como poder afirmar tal aseveración?
como concebir un verbo sin antes la razón?
ese verbo era un dios, pero uno inexistente...
El deseo como consumación del pecado
la razón y la inteligencia se ha hecho a un lado
y todo aquel errar en el delirio de la existencia
al filo de la hambruna, renegando la muerte
sin darte cuenta que caminas tomado de su propia mano.
Y tendido a las riveras de aquel río, yacen aquellos cobardes
que agradecen no haber vivido porque la propia vida ha sido un martirio,
el mismo infierno, prefiriendo haber sido concebidos,
permanecer en el etéreo, inmortales sin sentido, que tocar la tierra,
nacer para morir y luego arrepentidos,
solo agradecer el frío hierro de la daga que los libero de aquel suplicio.
Y ahora al encontrar el camino
corres libre a tu destino
habrás de encontrar la realidad
al final de esos valles, detrás de esas montañas
lejos muy lejos al horizonte
donde la suerte raya con el destino.
jesusatan.
